La fuente de la Nevera de Riaza

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Descripción

Es una de las tres construidas en las afueras de la población. Recibe este nombre de la antigua nevera o pozo de la nieve que aquí se levantaba. Junto a ella se encuentra el lavadero porticado, recuperado tras años de ruina.
El aspecto de la fuente, situada en un extremo del conjunto, data de la intensa reforma que sufrió en 1897. Tiene dos caños enmarcados por un arco de medio punto peraltado por los que sale el agua, que se vierte en un pilón rectangular. En la parte superior del arco aparece la trucha del escudo municipal enmarcada con laureles. La tapa del registro se añadió en 1915.
Las aguas de la fuente abastecen la pila del lavadero, dividida en dos. En torno a ella se alzan los pilares de piedra y madera que sustentan la cubierta que protege a las lavanderas del sol, la lluvia y la nieve.
El lavadero es uno de los elementos más representativos de la arquitectura popular de la comarca. Son, en general, construcciones humildes que, como la fragua o el horno de pan, eran de uso comunal. Era un espacio puramente femenino, donde se reunían las mujeres para hacer la colada provistas de sus tablas de lavar, los cubos de zinc para el agua y la ropa y sus pastillas de jabón. Pero además de las coladas, los lavaderos eran testigos mudos del intercambio de noticias y comadreos propios de la vida social del pueblo. Era una construcción presente en la gran mayoría de las poblaciones. El tamaño, los cerramientos, las formas de las pilas, varían según las condiciones de cada pueblo: número de habitantes, cercanía de fuentes y manantiales, materiales disponibles para la construcción… Su rápida desaparición en las últimas décadas es reflejo de los profundos cambios de los modos de vida en el medio rural, que se habían mantenido con pocas variaciones durante siglos.
Según comenta J.A. Cerezo en su Historia de la Villa de Riaza, la nevera, situada junto a este lugar, era un sencillo edificio de una planta que albergaba entre sus muros un profundo pozo circular con paredes de piedra en cuyo interior se depositaba la nieve para su conservación hasta el verano.


Localización