Vista 360º
Pulsa el botón de reproducir y desplázate usando el ratón, el dedo o los controles de la imagen
Galería de imágenes
Descripción
Es un templo de una sola nave con cabecera poligonal de estilo gótico postmedieval. En el lado norte se adosó un volumen que cumple las funciones de atrio, cuarto de reuniones y sacristía. La espadaña, sobre el muro oeste, completa el conjunto.
La portada es un elemento redispuesto en este lugar y procede de Mansilla. La arquivolta interior se decora con flores de seis pétalos inscritas en círculos y se trasdosea con taqueado. La intermedia es abocelada, mientras que la exterior presenta tallos entrelazados y piñas. El trasdós es también abocelado. La primera descansa en impostas con motivos vegetales, mientras que las otras dos lo hacen sobre columnas con basas, capiteles y ábacos. Estos presentan los mismos motivos que las impostas. Los capiteles, labrados con maestría, presentan un repertorio de animales fantásticos: sirenas-pájaro, grifos, águilas con cola de serpiente… Se trata de una de las mejores portadas del románico de la Tierra sepulvedana, y evidencia la calidad e importancia de la desaparecida iglesia románica de Santa Marina de Mansilla. El atrio protege la entrada a la nave, que es una puerta alta con arco de medio punto sobre impostas molduradas y acanaladas muy similares a algunos frisos de sepulcros y portadas del siglo XVI.
En el interior, el coro de madera se levanta a los pies y, bajo él, se sitúa la pila bautismal románica, decorada en forma de cáliz de flor con pétalos que se extienden hacia abajo formando el soporte. A ambos lados de la nave se disponen dos retablos barrocos que junto a la custodia se hicieron y fueron dorados en 1694 «siendo cura propio el licenciado Juan Miguel Gómez». El del lado del Evangelio alberga a la Virgen del Rosario y el de enfrente a Cristo crucificado. El arco triunfal que comunica nave y cabecera es de medio punto sobre gruesas medias columnas con capiteles dóricos, basas molduradas a toro-escocia y grandes pedestales cuadrangulares. Se pueden observar sobre los capiteles los arranques de los nervios de una bóveda de crucería, que no sabemos si se derrumbó o no se llegó a construir. En las esquinas de los cinco muros que forman la cabecera se disponen ménsulas con columnas adosadas que también servirían de soporte para la bóveda. En estos mismos puntos, pero en el exterior, se levantan grandes contrafuertes rectos que suben hasta la cornisa que comparten con la cabecera y la nave, dando un aspecto de uniformidad que hace pensar en que toda la iglesia sea del siglo XVI. Actualmente, las cubiertas interiores son de madera.
El retablo mayor ocupa el frente de la cabecera. Ha de ser obra del siglo XVII, de estilo barroco, pero todavía con sabor clasicista. En el cuerpo inferior, a los lados del expositor y el sagrario, se disponen dos lienzos con cuatro Apóstoles: san Pablo, san Pedro, san Andrés y Santiago. En el cuerpo principal, separadas por columnas estriadas y de fuste abombado con capiteles policromados, se encuentran las imágenes de san Román, san Juan Bautista y san Miguel. En el templete del remate, la Inmaculada Concepción.