Arquitectura tradicional en Santibáñez de Ayllón

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Descripción

El conjunto de las eras de Santibáñez de Ayllón es uno de los elementos más singulares de la arquitectura tradicional de toda Castilla y León. No existe ninguno como este, al menos, en toda la provincia de Segovia. La situación del pueblo en la ladera del valle del río Aguisejo le brindó tradicionalmente una riqueza de recursos muy variados: truchas y cangrejos en las aguas del río que, a su vez, servían para mover cuatro molinos; caza menor y pastos para el ganado en las laderas y baldíos; palomas criadas en los palomares; nueces, manzanas y hortalizas en la estrecha pero feraz vega; y trigo, centeno, cebada y avena cultivados en las llanuras de la parte superior del término.

Las construcciones que componen el pueblo se distribuyen por la ladera condicionadas por el relieve, formando calles estrechas e irregulares. Para aprovechar la pendiente, las casas suelen tener dos plantas y sobrado.

Pero lo más llamativo de la arquitectura popular de Santibáñez es el conjunto de eras que se encuentra en la parte superior del pueblo. Generalmente, las eras eran pequeñas explanadas empedradas para facilitar la labor de los trillos, pero en este caso son un ingenioso conjunto de construcciones ganadas a la ladera que incorporan el pajar en su parte inferior. Se trata de estructuras aterrazadas en la pendiente a las que se les adosa una construcción de planta rectangular que tiene un acceso superior desde la era y otro inferior que da al camino que une a esta con el pueblo. En ella se almacenaba la paja después de trillar, mientras que el grano se transportaba a los sobrados. De esta forma ingeniosa, el cereal que se cultivaba en el altiplano se cargaba siempre en sentido descendente, terminando el recorrido en los molinos emplazados junto al río. El gran número de eras aterrazadas y de pajares da una idea de la importancia de su actividad hasta no hace muchas décadas, como recuerdan los vecinos más mayores.

También son interesantes los palomares que se han conservado sobre una peculiar formación geológica conocida como la «discordancia de Santibáñez», con la que componen un paisaje de gran belleza.


Localización